Todas estaban paradas frente la carnosa barrera que las contenia. Todas se amontonaban, una tras otra, con la esperanza de poder escapar, librarse de aquel encierro. Todas tenian un fin comun, cruzar la barrera y cumplir su razon de ser. Tenian mucho tiempo acumulandose, una sobre otra convivian en total hacinamiento, y observaban las mil y una razones que existian para poder saltar la barrera y ser libres.
Esa tarde la barrera no aguantaba muchas embestidas, cansadas ya de esperar, cansadas de tanta injusticia, decidieron avalancharse todas juntas. Esa tarde la barrera no quiso aguantar mas.
Esa tarde lloro desconsoladamente, mientras las lagrimas corrian a raudales por sus mejillas. |